Metan a Raúl Tamudo y a Joseba Llorente en una aglomeración multitudinaria y pongan una portería en un extremo

http://raul-tamudo.blogspot.com/ Prueben a chutar un balón contra la muchedumbre. Y se sorprenderán. Con total seguridad, la sucesión, aparentemente aleatoria y fortuita, de rebotes acabará golpeando a uno de los dos delanteros de la Real, y la pelota traspasará la red.

Se llama olfato de gol, y dicen que eso no se entrena, que con eso se nace. Es el talento, la vocación, el sexto sentido. Eso no se aprende en las facultades ni tampoco lo enseñan en las escuelas. Solo los mejores entrenadores saben espolear ese don de nacimiento, que en el caso de un delantero significa vida, esperanza, puntos para su equipo.

Esperanza e ilusión son valores que transmite la Real a su afición en su regreso a Primera. Goles son amores, y Raúl Tamudo y Joseba Llorente suman juntos 172 tantos en su carrera en la máxima categoría. El catalán ha hecho 129 en Liga, solo superado por David Villa con 139, dentro de los goleadores del torneo en activo. Llorente ha hecho 43 en Liga en su periplo en Primera con Villarreal, Valladolid y el propio club txuri urdin.

La Real no se ha visto en una de estas desde los años ochenta. Desde entonces, nunca ha contado con una dupla que haya sumado tantos goles en Liga. Solo Satrústegui y Uralde -que no pudieron formar con asiduidad la delantera txuri urdin por la tardía lesión del navarro-, superaron los números de Llorente y Tamudo.

Monchi los admira
Para Monchi, director deportivo del Sevilla, esta delantera es garantía de permanencia en Primera División. Es franco, y no tiene dudas, y como es un gurú del fútbol, nos deja contentos. Monchi nos cae bien.

«Joseba Llorente es un batallas, su juego de espaldas es privilegiado, un lujo. Es un futbolista muy honesto. Se deja todo, y huele donde van a caer balones que acaban siendo gol. Tiene una trayectoria privilegiada, ha sido un gran profesional y por eso tiene todavía muchos años de fútbol. Es inteligente, y se va a compenetrar muy bien con Tamudo, a la Real le va a venir muy bien».

Si las lisonjas a Llorente no cesan, con Tamudo suenan a declaración de amor. Monchi prosigue. «Comprendo que alguien pueda dudar de su rendimiento tras el año difícil que vivió la campaña pasada. Ahora tiene 33 años, pero mira. Es posible que haya perdido, no lo sé, parte de su chispa, pero seguro que sabe suplirlo con las grandes virtudes, que al fin y al cabo, son las que le han hecho una figura de nuestra Liga. Inteligencia, olfato, astucia... Creo que es un complemente perfecto para Llorente. Los dos son un seguro de gol para una Real que, al ser recién ascendida, necesitará, en realidad como todos, ser efectiva de cara al marco rival. Esa delantera hay que tenerla muy en cuenta». Monchi afirma que «aunque nunca he tenido a los dos jugadores en cartera, sí que los he seguido con mucha atención».

«Y también he seguido y conozco a Diego Ifrán. En mi opinión, es un complemento, a plenitud de facultades creo que está un escalón por debajo de Joseba y de Raúl, pero es técnico y explosivo y si se recupera bien de su lesión, le puede venir muy bien a la Real en una zona en la que nunca sobra nada y siempre falta algo».

«En juveniles»
Juanma Lillo va más allá. «¿Tamudo y Llorente? Hombros fuertes de los que un equipo con problemas se puede colgar. Y ojo, la Real tiene un gran conjunto. Pero si el equipo adolece de inexperiencia en algún momento, siempre queda el recurso de los de arriba. Tamudo, hasta donde yo sé, ha sido siempre un profesional ejemplar. Es que es gol puro. El Espanyol se ha colgado de sus hombros durante diez años, y ha ganado títulos e incluso ha jugado una final europea». «Pero ¡eh!», nos cuenta Juanma con su tono de voz característico. «España le debe parte de su Eurocopa de 2008 a Tamudo. Nadie se acuerda, pero en la clasificación ante Dinamarca, cuando nadie creía que la selección pasaba, marcó un gol decisivo cuando faltaban Fernando Torres y David Villa». «Tamudo es movilidad, es velocidad, es remate, y nunca escatima esfuerzos. Nunca te deja con uno menos».

Lillo prosigue. «A Joseba Llorente le conozco desde juveniles. Es un libro abierto de cómo jugar a fútbol de delantero. Cuando entrenaba en Tolosa, me daban ganas de llevar a mis juveniles a Zubieta para que aprendieran sus movimientos. Su juego de espaldas es brillante. Mantiene su espíritu solidario del primer día. Siempre pensando en el equipo. Es tan bueno que acaba haciendo goles pero es el primero en ayudar en defensa. Van a ser un espectáculo arriba porque son dos jugadores que aprietan, que se complementan. Aunque no me quiero olvidar de Ima. De Agirretxe. Es de esos jugadores que juegan tan bien de espaldas que hacen mejores a los que juegan a su lado. También me acuerdo de Borja (Viguera). Deseo lo mejor a la Real. Si el fútbol no llega a estar podrido, con la compra de partidos, quién sabe, igual hoy seguía en Donostia. Para mí será un partido especial, sobre todo el que dispute en Anoeta», concluye.

Llorente y Tamudo. Dinamita pura. Miren sus cifras goleadores en Primera, y miren bajo estas líneas las únicas duplas que, en números, están a su altura.